El pensador débil
Decía Gómez de la Serna que El pensador de Rodin es un ajedrecista al que se
le ha quitado la mesa. Demasiado concentrado para poder pensar. Aunque sea menos
artístico, prefiero este payaso que piensa desde el humor, es decir con la capacidad
de reírse de los demás y no perder la sonrisa cuando se ríen de él. Y es que el humor
es capaz de limar nuestras durezas, eliminar irritaciones y rencores y mantener a la
gente alegre, aunque todo payaso tenga su fondo de tristeza. Pero ¿no son más
patéticos y ridículos los que andan por ahí de guapos y perfectos? Quien nos hace
reír es un cómico; quien nos hace pensar y luego reír es un humorista. El que ama lo
débil desde su debilidad es un cristiano.